viernes, septiembre 30, 2011
Somos muchos los que buscamos un lugar de reposo y relajación. Estos lugares que se encuentran en la mayoría de nuestras ciudad y alguna que otra casa intentan buscar un espacio con un punto de copia de la naturaleza junto con el control de esta misma al encontrarnos con un casco urbano.
Uno de esos ejemplos de control y “copia” nos lo encontramos en el jardín japones, tradición importada de China donde se desarrollará desde las eras Kamakura, Muromachi, Momoyama y el periodo Edo. En este jardín nos encontramos con elementos muy parecidos a la propia orografía japonesas, una gran cantidad de islas con un mar interior llamado Seto. Como no podía ser de otra forma, el propio jardín tiene una tradición religiosa o Sintoista, encontrándonos con verdaderas exquisiteces de este arte en muchos de los mausoleos del país.
Hay varios tipos de jardines japoneses dependiendo del uso que se hagan de ellos:Los jardines de paseo, al mas puro estilo occidental, son aquellos que nos facilitan el caminar entorno a un jardín de exquisita creación, soliendo tener un estanque en su centro.Los jardines de aposento son aquellos especialmente creados para se contemplados desde un lugar indicado.Los jardines de Té son lugares de tránsito y no de paseo. Estos jardines sirven como zona de paso hasta el propio templo de té.Los jardines de contemplación a semejanza con los jardines de aposento son aquellos especialmente indicados para la contemplación, pero hay que tener en cuenta que esto están hechos para una meditación de los monjes de los propios templos donde se ubican, haciendo de su composición algo especial y bien pensado.
